Es uno de los productos de la prolífica cantera extremeña, pero, no es un producto más. De novillero apuntó modos y maneras que le hicieron recibir con ambiente la borla de doctor. Sin embargo, como suele suceder, el paso al cuatreño supuso un frenazo en proyección y contratos. Lejos de amilanarse, el de Llerena tomó el sendero de la paciencia y redobló su dedicación. Los frutos no se hicieron esperar.